lunes, 30 de septiembre de 2013

Inferno

Libro: Inferno
Autor: Dan Brown




Esta tarde os traemos algo nuevo y además maravilloso. Dan Brown, el conocido autor de El código Da Vinci, deja en nuestras manos una obra magnífica de misterios históricos llamada Inferno, basada en el famoso poema épico La Divina Comedia, escrito por Dante Alighieri, mediante la cual nos adentrará en un mundo de simbolismo y donde el futuro de la humanidad está en cuestión. 

Robert Langdon, profesor de simbología de la Universidad de Harvard, aparecerá en un hospital de Florencia con una herida en la cabeza. En aquella habitación se empezarán a acaecer todo tipo de preguntas, disparos, persecuciones y simbolismos que el propio profesor deberá ir resolviendo a lo largo de su estancia en la capital regional de Italia con la ayuda de Sienna Brooks.  

La búsqueda de la solución a estas cuestiones y el seguimiento del camino gracias a la sabiduría de Robert Langdon, donde el poema de Dante será la base fundamental de esta obra, llevarán al profesor y a su acompañante Sienna, a adentrarse en la historia de esta ciudad italiana. 

Pero, ¿qué pasaría si todo hubiese sido un montaje?, ¿qué pasaría si aquello que se está buscando no se encontraba en la capital regional de Italia?, ¿está en peligro la humanidad?... Éstas son muchas de las preguntas que irán integrando Inferno y que deben ser resueltas. 

Elegante, detallista y, sobre todo, con afán de culturizar, son algunas de las palabras que definirían esta magnífica obra de Dan Brown. 


lunes, 23 de septiembre de 2013

Escucho la soledad

Y llegué justo al lugar donde no quería llegar... era justo el abismo. 

Lo rocé tantas veces, la tentación me acercaba a allí y finalmente caí. Las luces se apagaban lentamente hiriendo todo mi ser. Mi presencia se desvanecía, cada segundo que pasaba me hacía sentir que el tiempo se acaba y me hacía cada vez más pequeño. 

¿Dónde podía encontrarlo? ¿Dónde me podía encontrar a mi mismo? El tiempo pasaba y allí no hallaba a nadie. 

Sentía cómo mi cuerpo se iba hundiendo en lo más hondo de aquel abismo, recordando el transcurso de las estaciones, un ciclo sin fin que debía traer algo, un simple cambio en mi vida, que me hiciese arrastrarme por un mar de mentes, pero nunca llegó. Nunca llegó ese cambio tan esperado y por eso caí, caí en lo más hondo. 

Siento la oscuridad, escucho la soledad... 




José Ángel Moya 



lunes, 2 de septiembre de 2013

Ser recordado

Quizás las debería contar todas, pero lo di por perdido. Habían demasiadas estrellas sobre mi cabeza, en aquel cielo reluciente bordado de intermitentes luces.

Sigo pensando que existe algo extraño en ese universo, esas estrellas caen con el paso del tiempo, se apagan y son olvidadas, nunca más son vistas por nadie. ¿Somos realmente como estrellas, luciendo durante nuestra existencia y llegando a ser borradas de esta vida con nuestro fin e incluso olvidadas? 

No quier ser este tipo de estrella, mejor dicho, no quiero ser estrella. Quiero que mi existencia sea permanente, para toda la vida, sin vida propia. Pero hay algo más, no pretendo ser como aquellas personas que han inventado algo o han descubierto una nueva fórmula que combate un virus maligno. Pretendo ser recordado por aquellas personas cercanas, que han estado a mi lado durante mi luz, mi existencia y por tanto, para que estas personas me recuerden durante sus vidas, tendré que dejarles huella, marcarles el corazón y si es posible, acariciarles el alma. Sólo así podré tener constancia de ser recordado. 

Mis actos y mi existencia en sus vidas, marcará mi persona y sobre todo, mi "yo" cobrará vida permanente. 

Sean astutos, marquen huellas, inyecten su persona en el corazón de otros, acaricien sus almas y serán recordados. 


José Ángel Moya